No hace falta tener
un ojo morado,
no hace falta que
te brote sangre del labio,
ni tener señalados
tus dedos.
Duele lo mismo
aunque no tenga marcas.
Duele el cuerpo y
duele el alma.
Duele el quererte y
el soportar tu furia.
No miras, no ves,
te ciegas, te ciega…
No eres tú, te
transformas, te transforma…
Y eso duele…
Entonces es fácil
aborrecerte,
temerte y
desfallecer.
Solo queda callar y
llorar.
Llorar y sufrir.
Sufrir y amar.
Amar y perdonar…
Duele el maltrato, la violencia, de palabras, o física, duele y mata, preciosa entrada que has dedicado con tu poesía a este mal de la sociedad que no se extingue.
ResponderEliminarGracias por venir a visitar mi blog y dejar tus cálidas huellas, las que me han traido de tu mano hasta tu blog.
Deseo que el nuevo año que va a comenzar logres tus objetivos, se hagan realidad tus deseos y seas feliz cada día del año 2013.
Feliz año nuevo.
Un beso.
Gracias a ti, y por supuesto no quiero perder tu blog, voy a ponerme de seguidora para tenerlo cerca, y lo añadiré a mis listas de blogs.
ResponderEliminarFELIZ AÑO 2013 un brindis por cada uno de los días del año.
Y un beso.
Gracias María,estaremos cerca en este nuevo año...
ResponderEliminarTema delicado y cruel éste del maltrato, un pequeño gesto para tantas personas que lo sufren...
Feliz 2013 chin chin María, besos