La vida, a veces, no da opciones.
Tú habías resuelto abandonar algún camino, y nuevamente ves que vas a tener que seguir por él. De momento tendrás que retomarlo.
Estos son malos tiempos para hacer cambios, la vida parece que está parada, pero ni el reloj ni el calendario descansan.
Tendrás que echar sobre tu espalda este peso, y en silencio, intentar caminar sin caer.
Derrama ahora tus lágrimas, luego pinta tu sonrisa, perfuma tu cuerpo, sube a los tacones y prepárate para volar con las alas cosidas y desplumadas.
Regresa, que aún no se borraron las huellas.
Si hay que volver, hay que hacerlo con la frente en alto y la sonrisa bien puesta, que el show debe seguir.
ResponderEliminarBesos dulces para ti.
Bonito y muy útil consejo. Hay que sobreponerse a las circunstancias y no caer en el foso de la desesperación. ¡Adelante!
ResponderEliminarUn abrazo.
Esas huellas siempre ir dirigidas hacia un horizonte esperanzado y brillante.
ResponderEliminarOjalá oiga tu consejo.
Besos.
En esta vida a veces hay que repetir experiencias, huellas y lecciones...Por tanto es momento de mostrar la fortaleza, la paciencia y la dignidad para seguir adelante. Muy bueno, amiga.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo.
Es complicado, pero hay que seguir adelante con la mejor actitud posible.
ResponderEliminarLlego a tu rincón a través del blog de Mª Jesús Muñoz y vengo dispuesta a quedarme. Un abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar